Ni idea cuándo descubrí que los reyes magos no existían pero hoy, a mis treinta y tantos, he vuelto a abrir los ojos.
La puerta del almacén reveló en su interior doce carrozas destartaladas esperando ser remolcadas para sus últimos retoques. Convivían entre un cementerio de objetos cubiertos de polvo que a saber cuándo y por qué perdieron su valor.
Agradecí ser la única chica de chaleco reflectante que pasaba desapercibida entre el resto de trabajadores...porque mi cara debía ser como algún poema que dejé a medias por respeto a mi niña interior.
En las entrañas del misterio, con las manos en la masa y pensando en mis pequeños sobrinos, recordé el teatro, la magia del escenario y el desorden de atrás. El cine, el aclamado estreno y el trabajo de realización que acabó con mi pasión.
Corta y pega, une, duplica, ralentiza y móntate una película que haga feliz a miles de niños que quieren crecer rápido sin saber para qué.
Bendita inocencia, la que mira y ve luces de colores en un mundo tan gris, la que no sospecha del truco ni conoce la puerta de atrás.
Para tener tan claro que por ellos recogería caramelos hasta llegar al infierno, tengo el cielo ganado cada vez que vuelvo a casa con la resignación de ser más adulta de lo que me gustaría.
=> More informations about this toot | View the thread | More toots from Ariadna_90@masto.es
text/gemini
This content has been proxied by September (3851b).